Secretos de temporada
La mejor época para subir al Teide es durante los meses de primavera, abril y mayo, y luego de septiembre a noviembre. Si quieres parar en la cima y coger el teleférico de vuelta, asegúrate de ir con tiempo, y mete una chaqueta de plumas en la mochila; muchas veces arriba se llega a menos 0. Mientras que en la costa puede haber 20 ºC, en el cráter del Teide puede haber nieve y hielo, así que consulta las previsiones del tiempo y mira la webcam para ver las condiciones actuales.
Algunos tramos son bastante empinados, las condiciones atmosféricas se endurecen a medida que subes y la vegetación salvaje del volcán puede parecer desoladora, pero el valor paisajístico que ofrece la subida a la cima sin duda merece el esfuerzo.
Paradita para reponer fuerzas
El Centro de Visitantes al principio del camino no es muy famoso por su menú, así que llévate unas papas arrugadas (fáciles de digerir en carreras largas y con un alto contenido en potasio y magnesio) y el producto más exportado de Tenerife: plátanos.